lunes, 22 de noviembre de 2010

Aborto

- Estoy en tu seno, madre. Y tengo hambre de vivir.

   Aún no veo. No soy más que un ovillo en el costurero oscuro de tu vientre;
   pero ya hago ruido. ¿No me sientes?
   Ya soy yo. Soñando con salir al aire. 
   Ansiando ser otro. Conocerte desde mí. Amarte.

- ¿Se ha decidido ya? Bien. Recuéstese. 
   No se ponga nerviosa. Relájese.
   Lo eliminaremos limpiamente. 
   Sin consecuencias.

- Estoy en tu seno, madre. 
   Aún no puedo llorar. Ni reir. Ni saber cómo eres. 
   Pero ya hago ruido. ¿No me sientes?
   Ya soy yo. Distinto de ti, aunque carne de tu carne.
   Ya he llegado. Estoy aquí.
   Y hasta el mismo Dios me mira con dulzura. 
   Y está expectante.

- Quieta. Así. No se excite.
   Todo va perfectamente.

   No se dará cuenta de nada.

- ¿Qué es lo que pasa, madre?
   Tu vientre estaba oscruso, pero era cálido y limpio.
   Ahora siento frío; algo que no comprendo.
   Algo sucio, vil, cobarde, que se mezcla en mi sangre de tu sangre y me hace daño.

- Calma jovencita. Todo va bien. Se pasará pronto ...

- ¿Qué es lo que ocurre, madre?
  ¿Por qué no me hablas? ¿Por qué te escondes?
  ¿Acaso tú...? No es posible ...
  ¿Tú, mamá, vas a asesinarme?
  ¿Qué te he hecho? ¿De qué me culpas?
  ¿Por qué te estorbo? ¿Tu honra, acaso?
  ¿Acaso tener un hijo puede ser algo vergonzoso?
  ¿Tú comodidad? ¿Tú miedo? ¿Tú pobreza?
  Yo te daré ánimo para que seas valiente. 
  Yo dejaré de jugara para que tú te diviertas.
  Yo comeré poco para que tú te hartes ...

- Ya queda menos. No se esfuerce. Distiéndase ...
- Estoy indefenso, mamá. No puedo huír. 

  Tu vientre ya no es mi casa, sino mi cárcel. 
  La celda de un condenado a muerte. 
  A no ser niño. A no vivir en tu mundo. 
  A no jugar en la calle.
  Al menos, no me ehces al cubo de la basura. 
  ¡Qué no me coman los perros, madre!
   Hubiera sido un buen hijo. 
  Un padre de otros hijos que también fueran padres.
  Estás rompiendo en mí una cadena sagrada.
  ¡No lo hagas, mamá!
  ¡No me mates!
  Yo te quie....

- Listo. Como si hubiera sido un quiste ... ¿Ves, qué fácil?

No hay comentarios:

Publicar un comentario